Ever since I began my work with Girl Up in 2014, and I know that this has been the experience of many other members, I have received an immense amount of backlash and critiques. Many people have doubted the importance of the Gender Equality Movement, and have solely linked Gender Inequality with far away nations. However, the truth is that the importance and relevance of this movement in our continent have never been more important. Today, that is clearer than ever.
Some months after it happened, I became aware of the terrible and violent femicide that one of our own in Girl Up Latin America experienced. Although we already knew that femicide is anything but uncommon, the rates of it sky-high and that it would eventually come knocking at our door, the fact that it has happened doesn’t make it less terrible. We knew that it was coming, but we’re not any less outraged and saddened. Magdalena was murdered. One less fighter, one less leader, one less voice, another life lost. Another warrior was taken from us too soon, another life with infinite potential has been snatched from the movement, and there has been no justice. This is why we have to keep saying, without fear, #NiUnaMenos. We have to keep raising our voices, the voices of a global movement, to make them understand that we will not allow this anymore.
Latin America has been a continent in constant conflict ever since the European settlers invaded it. Whether it is Brazil, Colombia, Argentina, or in this case Mexico, systematic abuses are seen, felt, and experienced every single day. Us Latina girls and women are strong, resilient, and loud. Let us keep being these wonderful things, and let us use our voices for one of our own. Justice of Magdalena. Justice for Magui. Justice for girls. We deserve to have the guarantee of a safe and violence-free life the moment we’re born. Today, we have one less. But I’m certain that tomorrow, we will have thousands more ready to honor Magui’s life and use her loss as fuel to keep the fire of equality alive. Because for the thousandth time, we do not want one less. #NiUnaMenos.
Spanish
Desde que me vinculé con Girl Up en el 2014, y sé que esta es la experiencia de muchas otras personas, he recibido un sinfin de críticas. Muchas personas han dudado la importancia del movimiento de la Equidad de Género en el mundo, atríbuyéndole los problemas de género únicamente o a otros países lejanos. La verdad es que el movimiento nunca ha sido más necesario en nuestro continente, y entenderlo y afiliarse a este nunca ha sido más pertinente. Hoy es más claro que nunca.
Varios meses después de que sucediera, me enteré del lamentable y violento feminicidio que afectó directamente a nuestra comunidad de Girl Up Latinoamérica y Girl Up Global. Aunque ya sabíamos que los números eran altos, que el feminicidio no es poco común, y que algún día probablmente iba a tocar las puertas de nuestra casa, el día llegó y no nos duele menos por el hecho de que sabíamos que ocurriría. Magdalena fue asesinada. Una luchadora menos en el movimiento, una líder menos, una voz menos, una vida menos. Nos quitaron a una guerrera de nuestra comunidad cuando apenas estaba comenzando a vivir su vida, que seguramente estaría llena de éxitos, y no ha habido justicia. Por eso es importante proclamar, decir sin miedo, luchar y alzar nuestras voces para decir #NiUnaMenos.
Latinoamérica ha sido un continente en constante conflicto desde que fue invadido por los colonos europeos. Sea Brasil, Colombia, Argentina o en este caso, México, los abusos sistemáticos se ven, se sienten, y se viven todos los días. Las mujeres latinas somos fuertes, resilientes, y bullozas. Sigamos siendo todas estas cosas maravillosas, y alcemos la voz por una de las nuestras. Justicia para Magdalena. Justicia para Magui. Justicia para las niñas. Merecemos tener la certeza de una vida segura y sin violencia desde el momento en el que nacemos. Hoy tenemos una menos, pero confío en que mañana tendremos mil más que honrarán la vida de nuestra hermana Magdalena. Porque, por milésima vez, no queremos Ni Una Menos.